EL MADRID BASKET PINCHA EN CANARIAS

El inicio del encuentro en el Gran Canaria Arena no fue favorable para el equipo madridista. Los locales comenzaron con mayor intensidad, ritmo y precisión, dejando a los dirigidos por Chus Mateo rezagados. Aunque el técnico confió nuevamente en Carlos Alocén como base titular, el español no logró impulsar el ataque blanco, que solo consiguió cuatro puntos en los primeros cinco minutos. Mientras tanto, Nico Brussino y Albicy destacaron en el lanzamiento, ampliando la brecha en el marcador. Ante esta situación, Chus Mateo tuvo que detener el partido a mitad del primer cuarto.

En un intento por cambiar la dinámica, el entrenador modificó completamente la alineación, introduciendo la figura del doble base con Campazzo y el Chacho Rodríguez, además de dar entrada a Abalde, Rudy y Ndiaye. Sin embargo, esta reconfiguración no mejoró los porcentajes de tiro, y el primer cuarto finalizó con una preocupante desventaja de 25-9 a favor del Gran Canaria.

El segundo cuarto no trajo consigo la tan esperada reacción del Real Madrid. A pesar de una ligera mejora en el porcentaje de acierto, la diferencia siguió aumentando, principalmente gracias a Albicy, Slaughter y Happ, quienes dominaron tanto en el perímetro como en la pintura. Con un marcador de 41-21, Chus Mateo se vio obligado a detener nuevamente el partido para intentar corregir la situación.

La capacidad de anotación colectiva del Gran Canaria desbarató por completo al Real Madrid, cuyos intentos de reacción fueron contrarrestados por triples de los locales. El acierto en el tiro exterior permitió al Gran Canaria llegar al descanso con una cómoda ventaja de 57- contra un Real Madrid plagado de errores en el lanzamiento y pérdidas de balón.

Con una desventaja considerable, el Real Madrid buscaba iniciar el tercer cuarto de manera abrumadora para acercarse en el marcador. Sin embargo, esto no ocurrió, y el partido entró en una fase carente de emoción, con la diferencia oscilando entre los 20 y 25 puntos a favor del Gran Canaria. El equipo canario mantuvo un acierto que dejó al Real Madrid completamente inoperante.

A partir de ese momento, la prioridad del Real Madrid era limitar los daños en el marcador. Aunque la victoria ya era inalcanzable, buscaban mejorar su imagen. Sin embargo, Gran Canaria no disminuyó el ritmo y logró un resultado histórico al alcanzar los 100 puntos en el marcador local. La diferencia final de 100-77 reflejó la superioridad de Gran Canaria, con Happ y Slaughter destacando en un papel sobresaliente. Para el Real Madrid, fue un partido para olvidar rápidamente.